Se trata de Gustavo "Chino" Oviedo, reconocido integrante del Sindicato de Trabajadores Municipales. Las redes sociales se llenaron de mensajes de sorpresa y mucha tristeza por la noticia comunicada durante el fin de semana.
En las primeras horas del domingo 7 de enero se confirmó el fallecimiento de Gustavo Oviedo, más conocido como "el Chino". El hecho generó impacto entre sus conocidos, ya que hasta los días previos lo habrían visto por la ciudad. Hasta el momento se desconocen las causas que derivaron en este desenlace fatal.
Según pudo averiguar La Posta Noticias, habría sido hallado por un vecino el sábado por la noche en su casa, ya sin signos vitales. El cuerpo ya tendría varias horas en ese estado y la autopsia que le realizaron habría confirmado esa hipótesis. Fue despedido este lunes 8 en el cementerio de General Rodríguez, sin ceremonia previa, por el profundo dolor que generó.
Gustavo tenía cerca de 60 años y era hermano de Pablo Oviedo, histórico empleado municipal. Trabajaba en la parte de administración del Sindicato de Trabajadores Municipales (STM) y también como empleado en el Corralón Municipal. Se lo conoció como un "militante de ley", aquellos que pregonaban ese espíritu de lucha con quienes se cruzaba.
Desde el STM redactaron un sentido mensaje en redes sociales en el que señalaron "desde acá te recordaremos con tu humor, tu conocimiento sobre música, tu predisposición para cada actividad y tus ganas de ver al Sindicato siempre en lo más alto. Un compañero que entendía y militaba al peronismo desde lo más profundo de su corazón".
Quien también tuvo unas palabras muy lindas en la cuenta de Facebook fue Mirna Santillán, directora del Museo Ferroviario e Histórico, quien describió a Gustavo como "municipal, peronista, rockero, fanático del poeta Bukowski, amante del alcohol y su tristeza, de la soledad, de las charlas políticas, conocedor de la historia argentina y del movimiento obrero". Y agregó: "La certeza que tengo, es que vas a descansar en paz, porque fuiste un buen tipo, un laburante común, con conciencia de clase y que sabía desde las tripas de la crueldad del hombre en este mundo".
Por su parte, Federico Borgert, integrante del área de Seguridad del Municipio, también se expresó y reconoció haberlo "cruzado el viernes en bicicleta". Sobre el "chino", solo tuvo palabras de elogio y lo definió como "un gran amigo y compañero de la infancia", en una despedida que pegó fuerte.
